Dios Nos Busca Siempre
Hoy oímos hablar de la implacable búsqueda de Dios
hacia nosotros. Nuestras lecturas cuentan historias del
intenso deseo de Dios de compartir la vida divina con
nosotros. En el Éxodo, vemos cómo Dios muestra una persistencia y una compasión infinitas, incluso con los que
refunfuñan contra Dios o parecen haberse olvidado de él.
En el Evangelio de Juan oímos cómo Jesús, en su prolongada conversación con la mujer samaritana, la dignifica,
nombra verdades incómodas y la conduce gradualmente a
un nuevo camino de fe.
Podemos confiar en que, al llevar
nuestras propias confusiones, miedos y fracasos a Dios,
podemos recibir su misericordia y su perdón. Dios siempre
persiste y encuentra continuamente nuevas formas de
invitar a las personas a la unidad con Dios. Como describe
Pablo en Romanos, en la cruz vemos cómo Dios se desvive
por demostrar la profundidad y la amplitud del amor divino.
La Esquina de Oración Católica
Oración de San Patricio
Cristo conmigo, Cristo delante mí, Cristo detrás de mí,
Cristo dentro de mí, Cristo debajo mí, Cristo sobre mí,
Cristo a mi derecha, Cristo a mi izquierda,
Cristo cuando me acuesto, Cristo cuando me siento,
Cristo cuando me levanto,
Cristo en el corazón de todo hombre que piensa en mí,
Cristo en la boca de todo hombre que hable de mí,
Cristo en los ojos de todos los que me ven,
Cristo en los oídos de todos los que me escuchan.
La salvación es del Señor. La salvación es del Cristo.
Que tu salvación, oh Señor, esté siempre con nosotros.